Insostenible, alicaída y sin brújula. La educación española lleva décadas repitiendo los mismos errores, alimentando el fracaso escolar, desperdiciando capital humano y deteriorando el futuro de su economía. Lejos de corregirse estos indicadores, los últimos años han mostrado un escenario desolador. Canarias, emblema de este desastre, ha vuelto a quedar en vergüenza después de que elMinisterio de Educación publicara esta semana la Evaluación General de Diagnóstico 2009, un estudio donde se analizaron las competencias de los alumnos de cuarto de Primaria en todo el Estado. El Archipiélago está entre las tres comunidades con peores promedios. Pero, ¿qué implica este desfase? El resultado es obvio: mayores tasas de fracaso, de abandono y de repetidores. Y, ¿cuánto le cuesta eso a la Administración? A largo plazo, el paisaje es espeluznante: la estructura socioeconómica se ve vapuleada por la ausencia de titulados superiores capaces de encauzar el modelo productivo. A corto plazo implica u...